Trastornos mentales por el confinamiento:

Uno de los temores más grandes que existían cuando todo el tema de la pandemia y el coronavirus comenzó a adueñarse de nuestras vidas estaba claro. ¿Qué consecuencias psicológicas tendrían a medio y largo plazo?

Diferentes organismos sanitarios avisaron de que todos los ciudadanos que estuviesen expuestos a las limitaciones, el desconcierto, o la amenaza en la salud tendrían algún tipo de consecuencia. En muchas ocasiones estas consecuencias han sido leves estados de estrés, apatía, excesiva preocupación, pensamientos rumiativos o manías con la limpieza.

Sin embargo, como ya avisaba la OMS, imparablemente viviríamos un aumento en los casos de problemas de salud mental a nivel mundial, aumentando las consultas psicológicas, las prescripciones farmacológicas y los abusos con el objetivo de aliviar ciertas sintomatologías.

¿Realmente, cuales han sido los trastornos más habituales?

Algunas de las más habituales tienen que ver con cuadros ansiosos-depresivos ya que las personas han visto zarandeadas su seguridad financiera, laboral, y de salud.

-          A este respecto trastornos relacionados con la ansiedad generalizada o los ataques de ansiedad/pánico, o incluso personas que han podido desarrollar estrés post traumático derivadas de la hospitalización o enfermedad de un familiar. Estas personas también sufren de una falta de control en el pensamiento, con pensamientos irracionales acerca de la probabilidad de enfermarse (también alimentado por la sobreinformación y la incertidumbre) o la hipocondría.

-          Trastornos obsesivos compulsivos (TOC) sobre todo relacionadas con la limpieza han llegado a provocar en las personas lesiones cutáneas por un número muy elevado de veces que se lavan las manos, temperaturas extremadamente altas al hacerlo, o productos agresivos o abrasivos, llegando a lavarse directamente con alcohol puro o soluciones con una mala proporción de lejía por litro de agua.

-          Por supuesto las abusos de sustancias legales o ilegales, así como abuso de conductas como compras compulsivas, apuestas por internet, videojuegos o pornografía. El consumo de alcohol, así como de fármacos se ha disparado en el estado de alarma. Existen personas que consumen ambas cosas con la idea de potenciar los efectos que cada una tiene por separado, pudiendo dar lugar a cuadros de alucinaciones, delirios, paranoias, episodios de despersonalización, o comportamientos agresivos o antisociales.

¿Por qué se ha disparado tanto?

Realmente existen múltiples teorías, en primer lugar existe una reducción drástica de la vida social y de ocio, lo que impide la liberación del estrés y la gestión de la ansiedad contrarrestándola con actividades al aire libre, deporte, o la asistencia a eventos sociales o culturales. Al impedir esta vía, existe una necesidad de readaptación, de búsqueda de nuevas actividades que poder hacer en el entorno del hogar, con lo que aumenta el estrés por el simple hecho de tener que readaptarse, y además suben las frustraciones puesto que muchas veces aprovechamos estas situaciones para comenzar a hacer algo nuevo, con lo que todo proceso de aprendizaje conlleva esta parte de necesario estrés.

Además existe una inadecuación del entorno, puesto que en muchas ocasiones no existe espacio suficiente o son varias personas las convivientes, necesitando todos su propio espacio para desarrollar sus nuevos hobbies.

De igual modo, existe un aspecto curioso, y es que incluso las personas cuya actividad en el tiempo libre solía ser en el ámbito familiar, tienen un sentimiento de estrés al convertir su elección habitual en obligación, aumentando mucho el sentimiento de frustración e indefensión.

Por último es muy habitual el hecho de que la persona que tuviese ciertos conflictos psicológicos que no habían llegado a desarrollarse en patología, tuviese su vida organizada de tal forma que pudiese impedir este avance, por lo que en el momento en el que su rutina se ve tan gravemente afectada, aparece unadificultad a la hora de seguir manteniendo el equilibrio emocional, psicológico y físico.

Si este es tu caso o el de alguna persona que conocer, queremos decirte que es algo habitual, que tiene solución y que nosotros estaremos encantados de prestarte nuestros servicios en las diferentes modalidades de tratamiento que tenemos, para poder ayudarte a recuperar el control de tu vida cuanto antes. En el Centro Terapéutico Valle del Tietar hemos estado prestando servicios a todos aquellos que han estado afectados por las circunstancias derivadas del confinamiento, y queremos seguir acompañando a todo aquel que lo desee en su recuperación personal.