Probablemente hayas escuchado hablar de la terapia “EMDR”, ya que se ha convertido en una intervención psicológica que actualmente está en auge, llegando a ser un tipo de tratamiento verdaderamente intenso para el trabajo con pacientes con problemas ocasionados por experiencias traumáticas.
Hoy, desde nuestro centro terapéutico Valle del Tiétar ubicado en la Comunidad de Madrid, te explicamos en qué consiste este tipo de intervención y cómo nos ayuda a que los recuerdos negativos tengan menos carga emocional y a conseguir una vida más estable, fundamental para la recuperación de cualquier adicción.
La terapia de Desensibilización y Reprocesamiento del Movimiento Ocular, conocida como EMDR por sus siglas en inglés (Eye Movement Desensitization and Reprocessing) fue descubierta en 1987 por la psicóloga norteamericana Francine Shapiro, que descubrió que los movimientos oculares voluntarios pueden reducir la intensidad de la angustia de los pensamientos negativos, ayudando también a disminuir los síntomas ocasionados por los trastornos de estrés postraumático.
De esta forma, esta terapia hace que el paciente evoque recuerdos traumáticos y los asocie con otros sentimientos, pensamientos y recuerdos agradables. Es así como se pone en marcha la reducción del malestar (la desensibilización: proceso por el que, con el tiempo, revivir el trauma hace que se reduzcan los síntomas), al volver a procesar lo ocurrido mediante asociaciones más ajustadas y adaptativas, no perjudicando por tanto la capacidad de funcionalidad de la persona cuando se dan estímulos que recuerden al trauma.
Tras una sesión de EMDR, los pacientes muestran diversas mejoras: recordar sin dolor, transformación de las emociones convirtiéndolas en adaptativas, o la desaparición de recuerdos intrusivos, como por ejemplo la disminución de pesadillas, muy comunes en los traumas.
La terapia EMDR cuenta con la aprobación tanto de la Organización Mundial de la Salud (OMS) como de la Asociación Americana de Psicología (APA). De hecho, las investigaciones respaldan resultados clínicos positivos y muestran que es un tratamiento útil para trastornos como la ansiedad, la depresión, el TOC, el dolor crónico u otras patologías, viendo también su efecto positivo en las adicciones, donde se ve que los pacientes muestran altos niveles de exposición traumática, sobre todo por las consecuencias del consumo.
En este sentido, esta técnica potencia el tratamiento ayudando con la problemática y la superación de la adicción. ya sea alcohol, marihuana, cocaína, o conductas adictivas, como juego, compras compulsivas o nuevas tecnologías, así como otras conductas impulsivas que repercuten en la vida cotidiana.
Asimismo, a la par que se reduce al ansiedad, se visualiza un aumento de la autoestima y a la eliminación de creencias que han limitado al paciente y que le han impedido avanzar, (por ejemplo “es culpa mía”, “no sirvo” “no va a funcionar”) consiguiendo una mayor capacidad para recuperarse.
Entre los distintos métodos que usamos en el Centro terapéutico Valle del Tiétar ubicado en la comunidad de Madrid, ponemos a tu disposición la técnica EMDR para trabajar en la recuperación de tu problemática. Nuestro objetivo es acompañar al paciente y la familia para encontrar un camino que le permita tener una mejor calidad de vida, bienestar y autonomía, ofreciendo los recursos necesarios para que se sientan seguros y con las habilidades para vivir de una manera sana y funcional.
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