CULPAR A LOS DEMÁS DE LO QUE A MI ME CORRESPONDE

Culpa, Responsabilidad, Adicciones, Problemas.

Existen personas que son incapaces de asumir la responsabilidad de sus actos. Las podemos identificar como aquellas que utilizan frases tipo “Yo no he sido” “Es que tú…” “Tú dijiste” “Yo no tengo nada que ver con esto”, etc. De esta manera se eximen de asumir la responsabilidad de aquello que han realizado erróneamente, eliminando en muchos casos el sentimiento de culpabilidad, así como las consecuencias posteriores de tener que enmendar los errores de sus actos.

Existen múltiples causas que llevan a las personas a no responsabilizarse de sus actos. El miedo a las repercusiones, la evitación de las consecuencias, o simplemente el manejo y uso de poder sobre otras personas como medio para conseguir un fin. Todos estos estímulos generantes suelen, de manera general, estar presentes en la conducta adictiva. Dentro del proceso de la adicción, y concretamente en la fase de contemplación, estas conductas de desviación de la responsabilidad están presentes de manera constante. Existe en estos pacientes un sentimiento de culpabilidad derivado de la conciencia de haber actuado erróneamente consumiendo, con las consecuencias consiguientes. Con el fin de minimizar dicho sentimiento de culpabilidad, el autoengaño supone una barrera psicológica que actúa como defensa personal en beneficio propio, aspecto que les permite justificar nuevos consumos.

Esta tendencia, sin embargo, presenta una serie de repercusiones negativas. Y es que cuando uno no es capaz de asumir que el que dirige su vida, el que elige, el que actúa es uno mismo, difícilmente tomará la iniciativa de hacerse con el control de su futuro. El autoengaño no deja de ser una limitación importante que distorsiona la realidad y la hace cada vez más perjudicial, y más problemática.

Lo primero que se debe hacer para terminar con estas conductas autodestructivas consiste en admitir la realidad sobre lo acaecido. Para ello, las personas han de aprender a aceptarse a sí mismos, pues detrás de estas justificaciones existen personalidades con rasgos de autoestima baja, ansiedad y depresión. El proceso requiere una mejora de la autoestima, así como de la autoeficacia personal. En el caso de existir mayores problemáticas, como puede ser un trastorno adictivo, es de especial relevancia el tratamiento de desintoxicación.

El Centro de Tratamiento Valle del Tiétar pone a su disposición tratamientos individualizados y personalizados que les ayudan a manejar las situaciones de la vida cotidiana, con uso de metodología cognitivo-conductual que tiene como fin el aumento de la autoestima y la eliminación y manejo de los estados ansioso-depresivos, así como de las conductas adictivas. Con una recuperación del 82%, nuestros profesionales le ayudarán a mejorar su vida en todas sus esferas.

Fuentes

www.lamenteesmaravillosa.es

La atribución de la responsabilidad. En www.cop.es