Dudas frecuentes sobre adicciones

fileuploads/noticias/captura_1.png 16/10/2020

Dudas frecuentes sobre adicciones

Con el fin de aclarar aspectos que nos parecen importantes, hemos recogido algunas de las dudas más frecuentes sobre adicciones que nos han llegado por parte de las familias, y personas cercanas, así como de los propios adictos y adictas.  

¿Qué es la adicción?

La adicción está catalogada como una enfermedad mental por la OMS, causada por el consumo y abuso de una determinada sustancia química, o conducta, sobre la cual la persona pierde el control.

Las personas que desarrollan una adicción comienzan a ver alteradas sus necesidades básicas, situándose el consumo en primer lugar, por delante de aspectos como las relaciones sociales, familiares, el trabajo, las aficiones, o la propia salud. Esto les lleva a desarrollar una compulsión mediante la cual el organismo de la persona reclama la sustancia o conducta de forma intensa, mediante la aparición de un amplio espectro de síntomas denominados síndrome de abstinencia, que resultan desagradables para la persona y que desaparecen o disminuyen sustancialmente cuando se realiza la conducta adictiva.

¿Cómo sé si es un síndrome de abstinencia?

El síndrome de abstinencia es una experiencia subjetiva consistente en una serie de síntomas y sensaciones físicos, psicológicos y emocionales que se viven como desagradables para la persona, y cuya permanencia depende de la ausencia de ingesta o de realización de la conducta problemática (compras, juego, relaciones sexuales, deporte, trabajo).

En muchas ocasiones las personas no tienen en cuenta los síntomas psicológicos ni físicos como indicativo de una posible adicción, siendo más fácil para ellos ser conscientes del problema de adicción si aparecen temblores, torsiones de cuerpo, sudoración o palpitaciones, que si aparece irritabilidad, falta de concentración, apatía, ansiedad, dificultades en la fluidez verbal, o verborrea.

Este síndrome puede llegar a ser mortal en caso de que la persona sea adicta al alcohol, o en caso de que tenga alguna patología añadida como problemas de corazón, pudiendo provocarle la muerte si no se trata con medicamentos que palien el efecto.

¿Por qué resulta tan difícil salir de las drogas? 

Este aspecto resulta especialmente doloroso para aquellas familias que comienzan a ser conscientes del problema de un ser querido, que en numerosas ocasiones ha verbalizado sentimientos de culpa y vergüenza al respecto pero continúa consumiendo, e incluso perdiendo el control, cada vez aumentando más el consumo.

El consumo se convierte en un problema cuando las personas comienzan a utilizarlo para resolver algún conflicto que no son capaces de afrontar de otra forma. Puede ser déficit de habilidades sociales, incapacidad para manejar emociones desagradables, falta de autoestima, trastornos psicológicos añadidos, impulsividad, entre otros.

Al ser la respuesta que “resuelve” la necesidad de forma más rápida, se posiciona para la persona como la mejor, en base a la eficacia y velocidad, sin tener en cuenta los efectos secundarios o pérdidas añadidas que puedan derivar de esta acción. Por ello es fundamental que exista un tratamiento y seguimiento psicológico para asistir al paciente en la adquisición de respuestas y reacciones más adaptativas.

¿Quién tiene que participar en la terapia?

Aunque en muchas ocasiones se pueda pensar que son los propios adictos los que necesitan la terapia, se ha comprobado que en realidad están sumidos en un sistema codependiente que se ha adaptado a ellos y a sus circunstancias, y que en muchas ocasiones no saben modificar su comportamiento.

Es tan importante el cambio de la persona con el problema adictivo o psicológico, como el de la familia o el entorno cercano que tenga a su regreso. Para esto en el tratamiento  que realizamos en el Centro Terapéutico Valle del Tiétar siempre orientamos a las familias, con recomendaciones de pautas de comportamiento a adquirir que sirvan como mantenimiento de la abstinencia a medio y largo plazo.

¿La persona adicta controla sus impulsos, o lo hace porque quiere?

Este aspecto es bastante controvertido. Si bien es cierto que la persona, cuando está en consumo activo, siente un deseo de consumo tan intenso que en muchas ocasiones llevan a cabo comportamientos que nunca habrían imaginado hacer, en todo momento son conscientes de lo que están haciendo, pero la propia intoxicación les dificulta el analizar con claridad y objetividad las consecuencias. Por otro lado, el Craving o deseo de consumo, es una constante añadida a la enfermedad adictiva, que les hace experimentar con mucha intensidad el deseo de llevar a cabo acciones dirigidas a consumir aquello que les satisfaga.

Existe una manipulación y maquinación, en pro de lograr los medios para consumir, estando en abstinencia de la que son plenamente conscientes. Por esto mismo es de vital importancia que exista un periodo de desintoxicación para poder evitarles el deseo primario intenso y para muchos realmente difícil de controlar. La persona adicta es consciente de que está llevando a cabo esas acciones y el objetivo final que tiene, aunque a veces existe un intento de convencerse incluso a sí mismo de que existe otra explicación. 

Estas son sólo algunas de las preguntas que nos han llegado a través de consultas de e-mail o telefónicas, por parte de pacientes, familiares y allegados. Les recordamos que la primera consulta es gratuita, y estaremos encantados de que nuestro equipo de profesionales les atiendan, tanto a través de la Web https://www.ctvtietar.com/  como a través de nuestro teléfono de consulta 918 64 41 81.