Adicción a las nuevas tecnologías un problema cada vez más mayor

Cada día en el centro terapéutico Valle del Tietar ubicado en la Comunidad de Madrid,  nos vamos encontrando con más casos de adicción a las nuevas tecnologías, que pertenece al grupo de las llamadas adicciones sin sustancias, al no estar asociada a ninguna sustancia física sino, al uso excesivo de cualquier dispositivo de las llamadas Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC). En la que comparte con la adicción a las sustancias, la tolerancia, abstinencia y recaídas, además de los circuitos de refuerzo dopaminérgico, así como, los datos que aluden a un deterioro de los circuitos relacionados con la generación y procesamiento de emociones, atención ejecutiva, tomas de decisiones y control cognitivo, entre otras.

¿Cuáles son los síntomas que pueden sugerir una dependencia a las tecnologías?

 Cuando la persona va aumentando el tiempo de uso de los diferentes dispositivos, hasta el punto de perder el poder de gestionar el tiempo, hasta llegar a descuidar los hábitos de higiene, alimentación y sueño.

Descuido de las relaciones sociales, llegando en ocasiones hasta el aislamiento, utilizando las redes sociales para la relación, esto puede desembocar en problemas de comunicación familiar y social.

Se manifiestan cambios en la conducta y problemas de comunicación familiar y social, así como sentimientos de irritabilidad o ansiedad si no están conectados o interaccionando mediante algún dispositivo.

Y en algunas ocasiones se puede dar:

Fuerte sentimiento de necesidad de información, precisan de consultar internet de forma constante para conocer todo sobre temas de su interés.

Deseo por tener lo último en nuevas tecnologías para sentirse bien.

Dependencia de las interacciones y feedback en las redes sociales: malestar si no consiguen los “me gusta” esperados.

Hay algunas estrategias que permiten controlar la adicción a la tecnología, con el objetivo de limitar su uso y con ello su adicción.

Establecer límites y normas de uso del móvil. Concretar horarios y condiciones. Tiempo de exposición al día, después de haber cumplido con su tarea diaria (estudio, recoger el cuarto…). Para de este modo establecer unas prioridades y responsabilidades.

La utilización del móvil y redes sociales, como función educativa, lúdica, de comunicación, pero no debe utilizarse como refuerzo de premio o castigo.

No usar el móvil en la cama, baño, en momentos consensuados de familia o en actividades programadas con familia o amigos.

No utilizar el móvil de despertador. Dejar el móvil en la noche en otra habitación y en modo silencio o apagado.

Realizar una rutina de actividades gratificantes y saludables que fomenten la actividad física, la relación con los iguales.

Los adultos han de mostrar una actitud de acercamiento, interesarse por el funcionamiento de las redes sociales, juegos, establecer una guía común de comunicación en los intereses del menor o adolescente con las tecnologías… Bloquear o limitar contenidos o usos y argumentar con ellos y ser reflejo de los límites de uso

Establecer consecuencias ajustadas y cumplirlas si no se cumplen las condiciones de uso pactadas.

Fomentar la comunicación y la expresión emocional en el entorno familiar, compartir el día a día, estimular y fomentar la creatividad, aprender y enseñar mecanismos de regulación emocional y gestión de la frustración…

Pedir ayuda a profesionales cuando se tengan dudas o se muestren reacciones adversas difíciles de controlar cuando la situación esté suponiendo ya un problema de conducta. 

Es por ello si te encuentras en una situación similar, o conoces a alguien con esta problemática puedes ponerte en contacto con nosotros y un equipo de profesionales te ayudara y orientara con el fin de escoger la mejor opción que se adapte   a las necesidades el paciente. En el centro terapéutico Valle del Tiétar, ubicado en la comunidad de Madrid, estamos a tu disposición, puedes llamarnos sin compromiso al número de teléfono 636363651 o visitar nuestra web www.ctvtietar.com